Ray Dalio rompe con Silicon Valley: su nueva apuesta sorprende a los inversores
“No se trata de huir del riesgo, sino de encontrar el tipo correcto de incertidumbre”. Así podría resumirse el último movimiento de Ray Dalio, fundador de Bridgewater Associates, que ha dejado al mercado boquiabierto con una maniobra tan inesperada como reveladora.
En un entorno en el que el S&P 500 baila al ritmo de la volatilidad y, para muchos, la "sobrevaloración", Dalio ha optado por bajarse del tren estadounidense y embarcarse rumbo a China.
DEL ADIÓS A SILICON VALLEY A LA APUESTA POR PEKÍN
En el primer trimestre de 2025, Ray Dalio ejecutó una rotunda limpieza de cartera en el mercado estadounidense: redujo sensiblemente sus participaciones en gigantes como Alphabet, Meta Platforms, NVIDIA y también en el ETF del S&P 500.
El mensaje es claro: el atractivo de la tecnología norteamericana se ha desvanecido... al menos para este veterano de la macro global.
“No es que Alphabet o NVIDIA no sean grandes empresas”, puntualiza Gabriel Osorio-Mazilli, analista de MarketBeat, “pero su valoración actual no justifica el riesgo cuando el crecimiento futuro parece ya estar descontado en los precios”.
Dalio no se ha limitado a mermar posiciones. Ha reubicado su capital en lo que él percibe como el nuevo terreno fértil: la tecnología china. Y aquí entran en escena nombres como Alibaba y Baidu, dos gigantes que cotizan a múltiplos muy inferiores a sus homólogos occidentales.
EL PESO DE LAS VALORACIONES: UN MUNDO, DOS MERCADOS
¿Por qué este cambio tan drástico? La respuesta está en los números. En EEUU, el famoso “indicador Buffett” —que mide la capitalización bursátil frente al PIB— se sitúa alrededor del 185%, una cifra aún por encima de su media histórica. En cambio, en China el mismo indicador ronda el 64,5%. Traducido al lenguaje inversor: el mercado chino está mucho menos "sobrevalorado".
“La divergencia en valoraciones entre ambos países nunca había sido tan marcada”, asegura Osorio-Mazilli. “Y eso, para alguien que analiza los mercados desde una perspectiva macro como Dalio, es suficiente para reconfigurar toda una estrategia”.
Además, mientras que NVIDIA cotiza en el 88% de su máximo histórico, Alibaba apenas vale una fracción de los más de 315 dólares que llegó a alcanzar en 2021. El margen de revalorización, al menos sobre el papel, parece más generoso en el este que en el oeste.
TRUMP, ARANCELES Y LA OPORTUNIDAD BAJO LA TORMENTA
La tensión comercial entre EEUU y China, reavivada por los nuevos aranceles de la administración Trump, no ha disuadido a Dalio. Al contrario, parece haber reforzado su visión contraria.
“Las incertidumbres geopolíticas pueden ser oportunidades disfrazadas”, reflexiona Osorio-Mazilli. “Dalio entiende que los mercados sobrerreaccionan en el corto plazo. Y ahí es donde surgen las verdaderas gangas”.
Así, mientras muchos inversores huyen de China por miedo a las represalias comerciales, Dalio aprovecha para comprar lo que otros venden en pánico. Una jugada que recuerda a sus mejores movimientos durante crisis pasadas.
¿QUÉ PUEDE HACER EL INVERSOR MINORISTA?
La lección no es replicar punto por punto la cartera de Dalio. Es entender el razonamiento detrás de sus decisiones y extrapolarlo a nuestras propias estrategias.
¿Está sobrevalorado el Nasdaq? ¿Tiene sentido mantener posiciones en empresas que cotizan a 30 o 40 veces beneficios si sus márgenes ya han tocado techo? ¿Dónde están las oportunidades reales de crecimiento a medio plazo?
“La pregunta no es si el mercado estadounidense va a caer”, señala Osorio-Mazilli, “sino si, al nivel actual, compensa seguir apostando por él frente a alternativas más baratas y con igual o mayor potencial”.
Para quienes busquen exposición al movimiento Dalio sin complicarse demasiado, existen fondos cotizados centrados en China —como el KraneShares CSI China Internet ETF— que replican gran parte de las posiciones del gestor.
EL RIESGO DE NO CAMBIAR CUANDO EL MUNDO CAMBIA
Dalio no se limita a seguir la corriente. Su trayectoria se ha forjado precisamente en identificar puntos de inflexión. Y este podría ser uno de ellos.
El S&P 500 puede estar en su cima, pero eso no significa que el resto del mundo esté igual de caro. Cuando el capital más inteligente empieza a rotar de activos que parecen sobrevalorados a aquellos olvidados, conviene al menos mirar en esa dirección.
“Invertir es como navegar: no se trata de luchar contra el viento, sino de ajustar las velas”, concluye Osorio-Mazilli.
En un momento en que Wall Street parece vivir en un espejismo de valoraciones infladas y crecimiento artificial, Dalio ha puesto rumbo a Oriente. Quizás no todos estén preparados para seguirlo, pero su brújula apunta a algo que merece ser explorado.
