Nio se desploma tras una demanda del fondo soberano GIC por inflar ingresos

Según informó el medio chino Caixin, GIC acusa a Nio de violar las leyes de valores estadounidenses al reconocer indebidamente más de 600 millones de dólares en ingresos procedentes de una empresa de activos de baterías llamada Weineng (también conocida como Mirattery), que se presentaba como independiente pero que, según la demanda, estaba controlada por Nio.

La denuncia, presentada en el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York en agosto, también nombra como acusados al fundador y consejero delegado de Nio, Li Bin, y al exdirector financiero, Feng Wei. GIC sostiene que la compañía emitió declaraciones falsas y engañosas sobre su relación con Weineng, lo que habría inflado artificialmente el valor de sus acciones y causado importantes pérdidas al fondo soberano, que había adquirido títulos de Nio entre agosto y julio de 2022.

De acuerdo con Caixin, el origen de la disputa se remonta a un informe de venta en corto publicado en junio de 2022 por el fondo estadounidense Grizzly Research, que ya había acusado a Nio de emplear prácticas contables similares a las de Valeant Pharmaceuticals para inflar sus ingresos y márgenes de beneficio. Grizzly sospechaba entonces que Nio utilizaba una filial no consolidada —Mirattery o Wuhan Weineng— para aumentar artificialmente sus resultados financieros, en una estructura comparable a la del escándalo Philidor-Valeant.

El caso fue suspendido temporalmente este mes en un tribunal estadounidense, a la espera del resultado de una demanda colectiva previa contra la empresa.

La compañía aún no ha respondido oficialmente a las acusaciones de GIC. Según el portal especializado CnEVPost, el departamento legal de Nio está actualmente gestionando la demanda.