Locura por los móviles sin Internet: la demanda se dispara un 40% tras Pegasus
Tras saltar a la palestra el caso Pegasus, la pregunta que ronda a los usuarios es si hay alguien, o algo, dentro de nuestros smartphone que nos espía. Estas presuntas escuchas a diferentes parlamentarios han tenido un impacto importante en la vida política española. Además, tras un artículo publicado en The New Yorker la desconfianza también ha llegado a los consumidores.
Así se puede ver reflejado en el último análisis de mercado realizado por el comparador de precios Idealo.es, que resalta que algunas marcas y modelos de móviles clásicos, sin conexión a Internet, han aumentado su demanda en el último mes.
Una de esas marcas es la multinacional sueca Doro, cuyo número de búsquedas se ha incrementado un 40% en comparación con el mes de abril. Tanto es así, que el interés por modelos como el Doro 6040 se ha triplicado, según el comparador de precios. Asimismo, a la compañía sueca, se han unido teléfonos clásicos de empresas europeas como Nokia o Alcatel.
"Los conocidos popularmente como móviles bobos se resisten a irse y muchos consumidores se sienten más cómodos utilizando este tipo de dispositivos, frente aquellos que tienen acceso a Internet, que han demostrado tener una interfaz mucho más vulnerable", afirma Kike Aganzo, responsable de comunicación de idealo.es, y añade que "con todo, la demanda de los smartphones aún no se ha visto afectada, por lo que ni esta situación, ni el aumento del precio de los últimos años ha afectado a su número de búsquedas".
La empresa Idealo.es ha llevado a cabo una encuesta a consumidores en la que se ha revelado que el 97% de los españoles considera que sus dispositivos invaden la privacidad de algún modo. De hecho, la mitad de los encuestados afirman que el riesgo de sufrir un ataque a la intimidad es alto, mientras que el otro 35% señala que la amenaza era posible.
El sondeo ha puesto de relieve que los consumidores señalan los móviles como los aparatos electrónicos que más atacan la vida privada, por encima de cámaras de vigilancia. Mientras que 1 de cada 4 españoles consideran que el nivel de invasión es baja o nula y un 38% alto, según los datos publicados por la compañía.
