GSK invertirá 30.000 millones de dólares en I+D y fabricación en EEUU los próximos cinco años

La cifra se destinará a inversiones de capital en toda la cadena de suministro de GSK en el país, así como una mayor inversión en I+D para el descubrimiento y desarrollo de fármacos y en la actividad de ensayos clínicos.

La farmacéutica espera que EEUU ocupe el primer lugar a nivel mundial en cuanto a número de estudios, sitios y participantes de ensayos clínicos realizados por GSK durante los próximos cinco años.

"Nos comprometemos a invertir al menos 30.000 millones de dólares en EEUU durante los próximos cinco años, reforzando aún más la ya sólida I+D y la cadena de suministro que tenemos en el país", ha comentado la CEO de GSK, Emma Walmsley.

Como ha explicado, "1.200 millones de dólares del anuncio incluyen la construcción de una fábrica flexible adicional de productos biológicos de próxima generación, impulsada por IA, tecnologías avanzadas y talento experto para producir nuevos medicamentos respiratorios y oncológicos transformadores para los pacientes estadounidenses".

Así, dentro de esos 30.000 millones de dólares se incluye una nueva inversión de 1.200 millones de dólares en instalaciones de fabricación avanzadas, inteligencia artificial y tecnologías digitales avanzadas para construir nuevas fábricas y laboratorios biofarmacéuticos de última generación en EEUU.

Concretamente, se contempla la construcción de una nueva fábrica de productos biológicos flexibles en Upper Merion, (Pensilvania) para producir nuevos medicamentos potencialmente de primera clase para enfermedades respiratorias (EPOC, asma) y cáncer (hematológico, ginecológico, pulmonar y otros tumores sólidos). El inicio de la construcción está previsto para 2026.

También, nuevas capacidades de inteligencia artificial y tecnología digital avanzada en las cinco plantas de fabricación existentes de GSK en cuatro estados (Pensilvania, Carolina del Norte, Maryland y Montana), así como nuevas capacidades de fabricación de sustancias farmacológicas y nuevas y mejoradas capacidades y ensamblajes de dispositivos y autoinyectores.

Los analistas de AJ Bell comentan que "GSK ha seguido los pasos de AstraZeneca y ha prometido una gran inversión en EEUU. Aumentar su presencia debería ayudar a aliviar cualquier nuevo arancel sobre los medicamentos importados al país, y también le dará una buena imagen a Trump, ya que la inversión debería generar empleo".

Además, señalan que "esto se suma a una tendencia aún más preocupante: las compañías farmacéuticas le están dando la espalda a Reino Unido. Numerosos gigantes farmacéuticos han reconsiderado sus planes de inversión en Reino Unido este año, alegando incentivos gubernamentales poco atractivos para construir fábricas y laboratorios, estructuras de precios desfavorables para los medicamentos y una alta tasa de recuperación de los medicamentos vendidos al NHS".

"El gobierno de Reino Unido podría presentar la inversión de GSK en EEUU como una señal de fuerte colaboración entre ambos países, pero es otro ejemplo de cómo la industria británica de ciencias de la vida se está quedando atrás", dicen.