El Gobierno reformará el delito de sedición y se llamará desórdenes públicos agravados

Según explicó el jefe del Ejecutivo, el nuevo tipo penal será "más o menos homologable" con otras democracias europeas como Alemania, Francia, Italia, Bélgica y Suiza, y las penas por ese delito serán las que rigen en los códigos penales de los citados países.

Esta medida era una de las exigencias que puso sobre la mesa ERC para dar su apoyo a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023, aunque Sánchez negó la mayor y dijo que es una medida que él ha reivindicado "desde siempre" si cuenta con la suficiente mayoría parlamentaria. De hecho, remarcó que en las últimas semanas diversos grupos parlamentarios han dicho que están dispuestos a acometer esta reforma, por lo que el Gobierno ha decidido lanzarse a la piscina con ella.

Y para separar su decisión de las demandas de Esquerra Republicana remarcó que el independentismo no pide una reforma del Código Penal, sino una "amnistía", algo que el Gobierno "no va a aceptar" y que no forma parte de la legislación ni de la Constitución española.

La reforma del delito de sedición es, según sus propias palabras, un "paso adelante" en la "homologación" con los países del entorno europeo, y justificó una renovación porque "fue redactado en 1822". Asimismo, Sánchez negó que esta medida vaya a debilitar al Estado porque, según apuntó, se van a reconocer penas por esos delitos, pero que sean "homologables a las principales democracias europeas".

Eso sí, reconoció que esta iniciativa ayudará a "distender la situación en Cataluña" y a "superar este contencioso" que heredó de la administración anterior del presidente Mariano Rajoy (PP). Un asunto que, según dijo, "nunca" ha rehuido.

ERC APLAUDE LA MEDIDA Y EL PP LA CALIFICA DE "BARBARIDAD"

Y como era de esperar, las reacciones a la noticia no se hicieron esperar. ERC ha valorado "muy positivamente" la reforma del delito de sedición y ha indicado que es "un gran paso adelante" e "imprescindible" para acabar con lo que consideran "conflicto" entre España y el Gobierno de Cataluña.

Según fuentes de la formación presidida por Oriol Junqueras de las que se hace eco Europa Press, la reforma de la sedición "no hubiera sido posible sin la negociación política entre ambos gobiernos", y han defendido la apuesta de ERC por "la vía negociada" para poner fin a "la represión".

Pero muy distinta es la opinión del PP, que considera que Sánchez "ha renunciado a ser el presidente de todos los españoles" con esta medida que, a su juicio, evidencia que su Ejecutivo está "rendido a políticos fugados" como Carles Puigdemont. Por eso desde Génova han retado a los barones y cargos intermedios del PSOE a no callarse ante la "barbaridad política" que supone esa modificación del Código Penal, porque el silencio es una "traición" a sus valores.

Además, desde la formación que lidera Alberto Núñez Feijóo critican que Sánchez ha "humillado a una nación que merece un Gobierno más digno" porque "las leyes de España no pueden hacerse en la sede de ERC".