Puig se desploma tras resultados: la debilidad en fragancias vuelve a preocupar al mercado
Las acciones de Puig se han desplomado un 6,98% y han liderado las caídas en el Ibex 35, después de que la compañía española presentara ayer los resultados del primer semestre del año.

Si bien aumentó sustancialmente sus ganancias (275 millones, +78,8%) y mantuvo la guía de beneficios, las cifras de la firma catalana parecen no haber convencido debido a las menores previsiones en el negocio de perfumes y fragancias.
Así lo destacan los analistas de Jefferies, que en un reciente análisis señalan la dependencia de Puig de este negocio, ya que representa el 70% de sus ventas. Firmas como Barclays o Berenberg, incluso la propia Jefferies, habían avisado previamente de esta tendencia.
Según la firma norteamericana, ejecutivos de Puig afirmaron en una conferencia con analistas que esperan una "moderación global" en la venta de fragancias en el segundo semestre del año. Estas menores perspectivas se deben, sobre todo, a una menor demanda en Europa, así como en Oriente Medio y Asia.
"La compañía espera que la categoría de fragancias se modere a un crecimiento bajo de dígito único en el segundo semestre. Tampoco es alentador para las perspectivas del sector belleza. Esto empaña la historia a corto plazo, dada la elevada exposición de Puig a fragancias", detallan en su informe.
A Jefferies le preocupa esta previsión porque el crecimiento del sector belleza en el segundo trimestre estuvo liderado precisamente por las fragancias.
Ponen el ejemplo de L'Oréal, que reportó un crecimiento subyacente del 3,2% en el primer semestre, con fragancias creciendo a un ritmo cercano al 11% (y aportando, en el proceso, alrededor de un punto porcentual al total).
"Una desaceleración en fragancias (posiblemente liderada por EEUU, tras apoyos de ventas prearanceles en el segundo trimestre) podría limitar la aceleración de ventas necesaria para que L'Oréal cumpla con expectativas del consenso anual", explican. Con Puig, la tesis es similar.
Los expertos de Citi no difieren mucho del análisis de Jefferies. "Para el ejercicio 2025, Puig confirmó la guía de margen EBITDA (+20 puntos básicos, o pb), pero rebajó la previsión de ingresos hacia el extremo inferior del 6-8%, debido a una mayor moderación del crecimiento de fragancias durante el verano (estimación de crecimiento de mercado en dígitos bajos frente a dígitos medios anteriormente)", apuntan.
Pese a ello, los expertos de Jefferies son positivos en general con la compañía española. En su informe, la firma estadounidense destaca la expansión del margen del negocio de maquillaje (+360 puntos básicos) o del segmento de cuidado de la piel (+40 pb), gracias a la expansión de Uriage y Charlotte Tilbury. Además, destacan que la reiteración de la guía de beneficios es positiva, con una mejora en el margen EBITDA ajustado "similar a la de 2024 (+20 pb).
"Puig cotiza a alrededor de 14 veces el PER de consenso de los próximos doce meses. Nuestro precio objetivo implica una valoración de 18,5 veces, reflejando un crecimiento orgánico esperado de alrededor del 6,5% en 2025 y 2026. En comparación, el par estadounidense Interparfums cotiza a 22 veces", sentencian. Jefferies recomienda comprar Puig, a cuyas acciones otorga un precio objetivo de 22,7 euros, un 40% por encima de los precios de cierre de este martes.
Por su parte, Citi prevé un recorte "de dígitos bajos" (entre un 2% y un 4%) del beneficio por acción de consenso, impulsado por "la reducción de ingresos", motivo por el que esperan una reacción negativa en la cotización en el corto plazo. "No obstante, el riesgo bajista adicional debería ser limitado dada la valoración poco exigente", agregan estos expertos, que consideran que Puig está barata al cotizar a 15 veces beneficios esperados para este año fiscal, un descuento del 20% frente a comparables.
"Tras una caída de -10,4% en 2025 y 34,8% desde su salida a bolsa en mayo 2024, los múltiplos de cotización son atractivos, pero el entorno es adverso, con crecimientos sectoriales inferiores a su tendencia histórica, riesgo de mayor desaceleración de la demanda de productos no básicos, incertidumbre arancelaria y posible presión sobre márgenes. No obstante, los niveles de cotización actuales deberían ser un suelo para el valor", resumen los estrategas de Bankinter.



