Walmart mide el pulso del consumidor con dos factores de riesgo antes de Jackson Hole

"Estas cifras no solo serán un indicador útil de la salud del consumidor, sino que los participantes también estarán interesados en ver cómo las empresas se desenvuelven en el cambiante panorama comercial", afirma Michael Brown, estratega de investigación sénior de Pepperstone.

Y es que las cuentas de la compañía recogen dos factores de riesgo que serán clave en este informe de ganancias: los aranceles y la inflación. Sobre todo, después de que el pasado mes de mayo, Walmart advirtiera de una subida de precios para hacer frente a las tarifas de Donald Trump.

"Me preocupa que los consumidores empiecen a ver precios más altos. Probablemente empezarán a verlo hacia finales de este mes, y luego, sin duda, mucho más en junio", dijo en ese momento John David Rainey, director financiero de la empresa.

"El factor tarifas tendrá también su protagonismo, tanto en lo que puede terminar afectando a la demanda, por incrementos de precios, como a los márgenes de la empresa, si opta por no traspasar los mayores costes a sus clientes", comentan los expertos de Link Securities.

De hecho, el debate sobre los aranceles y su posible impacto en la economía estadounidense sigue preocupando al mercado. "Un ligero aumento del desempleo y el impacto acumulado de la inflación de los últimos tres o cuatro años finalmente están afectando al consumidor, incluso antes de que los importadores estadounidenses finalmente dejen de asumir los costes adicionales y comiencen a trasladarlos en forma de precios más altos para sus clientes", señala Russ Mould y Danni Hewson, director de inversiones y jefe de análisis financiero de AJ Bell, respectivamente.

Por ello, y después de que Walmart mantuviera sin cambios sus previsones anuales durante la presentación de resultados del primer trimestre, el consenso anticipa un beneficio por acción (BPA) de 0,73 dólares, un aumento interanual del 9%, sobre ingresos de 176.000 millones de dólares, lo que refleja un incremento del 4%.

Del mismo modo, se espera que los ingresos operativos de Walmart alcancen los 8.700 millones de dólares, con un crecimiento interanual esperado del 10%.

Además, los inversores estarán atentos a las ventas comparables, la fortaleza del comercio electrónico y cualquier actualización de las guías, en un contexto de cautela en el panorama del consumidor.

¿SEGUIRÁ JUSTIFICANDO SU VALORACIÓN PREMIUM?

A este respecto, para Lale Akoner, analista global de mercados de eToro, los resultados de Walmart mostrarán "si el gigante minorista puede seguir justificando su valoración premium en un contexto de consumo más desafiante".

Esto en un escenario de un consumidor estadounidense mixto, en que la la inflación se ha moderado, pero el gasto discrecional sigue siendo irregular de cara a la segunda mitad del año. "Ahí es donde la escala y el enfoque en el valor de Walmart le otorgan una ventaja", añade el estratega.

Con todo, más allá del negocio de alimentación, la compañía se apoya en negocios digitales de mayor crecimiento —desde publicidad y pagos hasta su marketplace online— para impulsar la rentabilidad.

"Estas nuevas líneas de ingresos se expanden a un ritmo acelerado (alrededor de un 40% anual) y podrían marcar la narrativa de los resultados de Walmart más que el comercio minorista tradicional en los próximos años. La incorporación de categorías como los coleccionables muestra cómo amplía su alcance y compite directamente con rivales en línea".

En definitiva, "con las acciones cotizando cerca de máximos de valoración en dos décadas, los inversores estarán atentos a si la combinación de la fortaleza en productos básicos defensivos y el motor de crecimiento digital de Walmart puede sostener el impulso en una economía de consumo volátil", concluye Akoner.