Sube al 45% los demandantes de vivienda que no son propietarios de ningún inmueble
El 45% de quienes han comprado o intentado comprar una vivienda en el último año no tenía ningún inmueble en propiedad, lo que supone un crecimiento de seis puntos respecto al 39% registrado en 2024, según las cifras del informe elaborado por Fotocasa Research.

Por consiguiente, un 55% de los compradores de vivienda en el primer semestre de 2025 ya eran propietarios de una vivienda.
En el extremo opuesto, los vendedores mantienen una situación mucho más ligada a la posesión de inmuebles. El 89% de quienes han vendido o intentado vender en el último año disponían al menos de una vivienda, un porcentaje muy superior al de los compradores, aunque dos puntos por debajo del 91% registrado en 2024.
La variación en la tasa de propietarios presenta matices importantes según los tramos de edad. Entre los demandantes de 35 a 44 años, la proporción de propietarios cae diez puntos en un año, pasando del 59% en 2024 al 49% en 2025. Por su parte, los mayores de 55 años siguen siendo el grupo con mayor porcentaje de propietarios, aunque también sufren un retroceso: la tasa de demandantes que poseen al menos una vivienda pasa del 87% en 2024 al 82% en 2025. Dentro de este grupo, destaca la caída en quienes declaran ser propietarios de dos viviendas, que bajan del 20% al 15%.
Entre los más jóvenes (18 a 24 años), en cambio, se produce una ligera mejora: el 28% de quienes buscan vivienda ya poseen un inmueble, frente al 24% del año anterior. Igualmente, en el grupo de 25 a 34 años, el porcentaje de demandantes propietarios de vivienda ha pasado del 35% en 2024 al 41% en la actualidad, aunque esta cifra se encuentra por debajo de la registrada en 2023, cuando alcanzó una tasa del 49%.
"El aumento de compradores de primera vivienda muestra que las nuevas condiciones hipotecarias más favorables y las ayudas públicas están empezando a dar resultados. La mejora del acceso al crédito y los programas de apoyo a jóvenes y primerizos están reactivando la demanda, especialmente entre quienes antes quedaban fuera del mercado", explica María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa.
Añade que, "por otro lado, la reducción de compradores con un perfil inversor y el aumento de aquellos que adquieren para uso habitual muestran que el mercado se orienta hacia la necesidad residencial, más que hacia la rentabilidad. La vivienda continúa siendo un bien esencial y un símbolo de estabilidad, pero la capacidad de compra se concentra en quienes aún logran acceder al crédito o cuentan con ahorro acumulado".



