El sector manufacturero de EEUU mejora en septiembre pero se contrae una vez más
El sector manufacturero de EEUU ha mejorado en septiembre pero se ha contraído por séptimo mes consecutivo, como muestra el índice PMI que elabora el Institute for Supply Management (ISM), que se ha situado en 49,1 puntos, desde los 48,7 del mes anterior. El dato ha sido superior a lo anticipado por el consenso, que había previsto 49 puntos.

Susan Spence, presidenta del ISM, ha destacado que "en septiembre, la actividad manufacturera estadounidense se contrajo a un ritmo ligeramente menor, siendo el crecimiento de la producción el factor más importante en el aumento de 0,4 puntos porcentuales del PMI manufacturero".
"Sin embargo, las caídas combinadas de los índices de nuevos pedidos e inventarios (4,2 puntos) superaron el aumento del índice de producción (3,2), lo que hace que la mejora del PMI manufacturero sea insignificante. El aumento de los nuevos pedidos del mes pasado (un aumento del índice de 4,3 puntos entre julio y agosto) parece haberse trasladado a la producción, pero no parece sostenible dada la posterior caída de los nuevos pedidos en septiembre", agrega.
En septiembre, el índice de nuevos pedidos ha regresado a la contracción tras un mes de crecimiento, luego de caer hasta 48,9 puntos, por debajo de los 51,4 de agosto. La lectura del índice de producción ha alcanzado los 51 puntos, superior en 3,2 unidades a la cifra del mes anterior.
Asimismo, el índice de precios ha marcado 61,9 puntos, lo que representa una caída de 1,8 puntos en comparación con la lectura de agosto. El índice de cartera de pedidos ha subido hasta 46,2 unidades, desde las 44,7 previas. El índice de empleo ha subido hasta 45,3 puntos, frente a los 43,8 anteriores.
PMI DE S&P GLOBAL
Este miércoles también se ha publicado el índice PMI que elabora para el sector S&P Global y que ha caído hasta 52 puntos, desde los 53 previos.
La agencia explica que "los datos del PMI de septiembre indicaron una mejora sólida, aunque más lenta, en las condiciones operativas del sector manufacturero estadounidense".
"La última encuesta mostró un menor aumento de la producción, mientras que el crecimiento de la cartera de pedidos se moderó debido a que los aranceles continuaron afectando las exportaciones. Los aranceles y la incertidumbre política general también perjudicaron la evaluación de las empresas sobre las perspectivas comerciales, pero las expectativas de relocalización de la producción manufacturera y la esperanza de una mejor demanda para el próximo año hicieron que la confianza se mantuviera positiva en general", añade.
Mientras tanto, las presiones de costos volvieron a ser elevadas, y los aranceles, según se informa, fueron el factor dominante que impulsó al alza los precios de compra generales. Si bien las empresas intentaron trasladar los mayores costos de los proveedores a los clientes, la presión competitiva y las señales de una demanda débil hicieron que la inflación de los precios de producción se moderara a su mínimo en ocho meses.
Chris Williamson, economista jefe de negocios de S&P Global, destaca que "la producción manufacturera estadounidense aumentó por cuarto mes consecutivo en septiembre, pero el repunte perdió impulso debido a que las empresas informaron una caída en el crecimiento de la cartera de pedidos, junto con una acumulación de inventarios de productos terminados sin vender".
"A pesar de la desaceleración del crecimiento de la demanda, muchas fábricas produjeron más bienes, utilizando materias primas que se habían almacenado antes de la implementación de los aranceles. Esto representa un riesgo a la baja para la producción futura en ausencia de un repunte de la demanda, aunque también sugiere cierta disminución de las presiones sobre los precios", concluye.



