Ryanair tensa la cuerda con Aena y amenaza con más recortes de plazas en España
El consejero delegado de Ryanair, Michael Oleary, tensa la cuerda con Aena y ha amenazado con recortar un millón de asientos adicionales en los vuelos a España el próximo verano si el gestor aeroportuario no rebaja las tarifas.

"Tengo previsto volver a Madrid dentro de dos semanas y probablemente anunciaré otro millón de asientos que saldrán el próximo verano", ha señalado el CEO de la aerolínea a Financial Times después de la reunión anual de Ryanair.
Cabe recordar que la compañía anunció a principios de septiembre importantes recortes en su capacidad en la España regional para la temporada de invierno de 2025 debido a las tasas aeroportuarias "excesivas y poco competitivas" aplicadas por Aena, el operador aeroportuario. La aerolínea reducirá su capacidad en los aeropuertos regionales en un 41% y en las Islas Canarias en un 10%, lo que se traduce en la pérdida de más de un millón de plazas solo en invierno y aproximadamente dos millones al año.
En este sentido, Ryanair ha instado a Aena a cancelar los aumentos de precios. "Si el gobierno español no puede convencer a Aena [de que dé marcha atrás], no tengo ningún interés en atenderlos", ha añadido OLeary.
Sin embargo, desde el Gobierno, el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha criticado el "chantaje", la "extorsión" y las "falacias" de Ryanair para justificar que abandonará algunos aeropuertos españoles por la subida de tasas aeroportuarias.
Por su parte, Maurici Lucena, presidente y consejero delegado de Aena, un durísimo comunicado contra la aerolínea irlandesa, destacaba "la insolencia y la desinhibición de las exigencias públicas de Ryanair" a los Gobiernos democráticos en los países en los que opera, para obtener ventajas económicas, "revelan dos características muy arraigadas y poco edificantes de esta aerolínea".
La primera, indica, es que Ryanair "tiene una inquietante concepción plutocrática del sistema político". "Es decir, atemoriza a la opinión pública con la retirada de sus aviones, reclama la dimisión de ministros de media Europa y de la presidenta de la Comisión Europea, se burla de los políticos elegidos democráticamente y pide el cambio de leyes a su favor porque considera que la toma de decisiones de los Gobiernos debe doblegarse a los intereses de las empresas con mayor poder económico, como Ryanair, en vez de proteger el interés general", explica.
La segunda característica, agrega Lucena, es "una política de comunicación y de relaciones institucionales de Ryanair en permanente y deliberada colisión con los hechos objetivos y la veracidad".
De hecho, para Lucena, las intenciones de Ryanair son claras: "Ganar más dinero, aunque sea sufragado por el bolsillo de los contribuyentes españoles".



