First Brands se declara en quiebra en Estados Unidos por su elevada deuda
El fabricante estadounidense de componentes para automóvil First Brands se ha declarado en bancarrota. La compañía ha comunicado que se acoge al Capítulo 11 de la ley de quiebras para "estabilizar sus operaciones comerciales y facilitar una transacción que maximice el valor". Y todo ello, en medio de una elevada deuda y una delicada situación financiera.
En este sentido, y para apoyar la continuidad del negocio, First Brands ha avanzado que un grupo ad hoc de accionistas cruzados ha acordado proporcionar a la empresa 1.100 millones de dólares en financiación de deudor en posesión. "Esta financiación proporcionará el capital necesario para que la compañía mantenga sus operaciones, atienda los pedidos de sus clientes y cumpla con sus compromisos con sus proveedores y socios desde el inicio de los casos de quiebra".
Además, First Brands ha presentado varias "Mociones de Primer Día" habituales. Tras la aprobación judicial, estas mociones permitirán a la empresa, entre otras cosas, continuar con el pago de salarios y beneficios a sus empleados, cumplir con los compromisos con los clientes, así como con las obligaciones posteriores a la solicitud con proveedores y socios.
"Las acciones de hoy marcan un paso importante para estabilizar las operaciones de First Brands y asegurar un futuro a largo plazo para la cartera de marcas de repuestos automotrices de primera clase de la Compañía", ha señalado Chuck Moore, director de reestructuración de First Brands.
"Con el compromiso de financiación de nuestros principales socios financieros, seguimos centrados en apoyar a nuestros empleados, colaborar con nuestros valiosos proveedores y ofrecer tecnología automotriz de posventa de primera clase a nuestros clientes en todo el mundo. Confiamos en la solidez de la cartera líder en la industria de First Brands y en el papel esencial que desempeñamos en la cadena de suministro automotriz", ha añadido.
No obstante, la quiebra de la compañía ha desatado las preocupaciones por una táctica de endeudamiento conocida como factoring, esto es, vender una parte de los ingresos a futuro a cambio de liquidez inmediata. Es más, según recoge Bloomberg, First Brands ha registrado pasivos de entre 10.000 millones y 50.000 millones de dólares, y activos de entre 1.000 millones y 10.000 millones de dólares.
Así, el escrutinio se intensificó el pasado mes de agosto cuando First Brands suspendió una propuesta de refinanciación de su deuda y los inversores pidieron a la compañía que obtuviera un informe de calidad de ganancias. Pero los inversores también han mostrado su nerviosismo después de que fondos como Apollo Global Management o Diameter Capital Partners hayan cerrado sus posiciones cortas.
El colapso de First Brands refuerza las preocupaciones históricas sobre el uso que las empresas hacen de la financiación de la cadena de suministro para generar deuda que a menudo queda fuera del balance.
