EEUU revisa al alza el PIB del segundo trimestre hasta el 3,8%, mejor de lo esperado
EEUU ha revisado al alza el PIB del segundo trimestre, hasta una subida del 3,8% en tasa interanual, frente al aumento del 3,3% que había arrojado la segunda lectura, según la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio. El dato se ha situado por encima de lo anticipado por el consenso, que esperaba se mantuviera en el 3,3%.

"El PIB real se revisó al alza con respecto a la segunda estimación, lo que refleja principalmente una revisión al alza del gasto del consumidor", ha explicado el organismo.
En este sentido, y en comparación con el primer trimestre, el repunte del PIB real en el segundo trimestre ha reflejado principalmente una desaceleración de las importaciones y una aceleración del gasto de los consumidores que han sido parcialmente compensadas por un descenso de la inversión.
"Desde la perspectiva de la industria, el aumento del PIB real reflejó aumentos del 10,2% en el valor agregado real para las industrias privadas productoras de bienes y del 3,5% para las industrias privadas productoras de servicios, que fueron parcialmente compensados por una disminución del 3,2% en el valor agregado real para el gobierno", ha detallado la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio.
Así, el índice de precios de las compras internas brutas se ha elevado un 2,0% en el segundo trimestre, revisado al alza 0,2 puntos porcentuales con respecto a la estimación anterior. El índice de precios de gastos de consumo personal (PCE) ha aumentado un 2,1%, revisado al alza 0,1 puntos porcentuales. Excluyendo los precios de los alimentos y la energía, el índice de precios PCE ha mostrado un incremento del 2,6%, también revisado al alza 0,1 puntos porcentuales.
Para Bret Kenwell, analista de inversiones en EE UU de eToro, "al comienzo de este trimestre, las estimaciones se situaban en solo un 2,5 %. Aunque estas revisiones del PIB son retrospectivas, ofrecen una imagen algo tranquilizadora de la economía estadounidense".
De hecho, el experto destaca "que el consumo personal se ha revisado al alza, lo que da más credibilidad a la idea de que los consumidores siguen mostrando resistencia. Esta observación se ha confirmado en los últimos informes de ventas minoristas y ha sido una de las conclusiones clave de las conferencias telefónicas de las empresas en la última temporada de resultados".
"Aunque los sólidos informes económicos pueden influir en las expectativas de recorte de tipos, hay que recordar que una economía fuerte y un mercado laboral sólido son fundamentales para el mercado alcista. Por mucho que los inversores quieran tipos más bajos, una economía sólida es más importante. Como prueba, basta con ver cómo ha evolucionado el S&P 500 en los últimos años en medio de unos tipos de interés elevados", concluye Kenwell.



