El Banco de Inglaterra mantiene su enfoque "gradual y cauteloso" y deja los tipos en el 4%
El Banco de Inglaterra (BoE) considera que sigue siendo apropiado adoptar un enfoque "gradual y cauteloso" para la retirada de la restricción monetaria y ha decidido mantener los tipos de interés en el 4%, su nivel más bajo desde marzo de 2023, cumpliendo con las previsiones del mercado.

En su reunión de septiembre, el Comité de Política Monetaria (MPC) ha votado por una mayoría de siete miembros (Andrew Bailey, Sarah Breeden, Megan Greene, Clare Lombardelli, Catherine L. Mann, Huw Pill y Dave Ramsden) a favor de mantener el tipo de interés bancario.
Por su parte, dos miembros (Swati Dhingra y Alan Taylor) votaron a favor de reducirlo en 25 puntos básicos, hasta el 3,75%.
El organismo británico explica que se ha producido una desinflación sustancial en los últimos dos años y medio, tras shocks externos previos, apoyada por la postura restrictiva de la política monetaria. Un progreso que ha permitido reducciones en la tasa de interés bancaria durante el último año.
Ahora, el Comité "sigue centrado en contener cualquier presión inflacionaria persistente, existente o emergente, para que la inflación vuelva a su objetivo del 2% de forma sostenible a medio plazo", indican.
Además, aseguran que el BoE "se mantiene alerta" ante el riesgo de que el aumento temporal de la inflación pueda ejercer una presión alcista adicional sobre el proceso de fijación de salarios y precios.
"El crecimiento salarial se mantiene elevado, pero ha disminuido y se prevé que se desacelere significativamente durante el resto del año. La inflación de los precios al consumidor en el sector servicios se ha mantenido prácticamente sin cambios en los últimos meses. Los riesgos al alza en torno a las presiones inflacionarias a medio plazo siguen siendo importantes en la evaluación de las perspectivas del Comité", señalan.
Respecto a las decisiones futuras, el organismo reitera que la política monetaria "no sigue una trayectoria preestablecida" y que el Comité "se mantendrá atento a la acumulación de evidencia", con lo que el momento y el ritmo de las futuras reducciones dependerán de la medida en que las presiones desinflacionarias subyacentes sigan disminuyendo.
¿HABRÁ RECORTES ESTE AÑO?
La última decisión del BoE "tiene muy pocos elementos que puedan alterar el panorama", comentan los analistas de ING, que creen que la decisión no sorprende demasiado, dado que "no ha habido muchos cambios desde la reunión de agosto que justificaran un cambio de postura más drástico".
Con un 4%, el tipo de interés bancario se sitúa por encima del nivel neutral "y creemos que se avecinan dos o tres recortes más", dicen. No obstante, se preguntan si se producirán este año.
"Prevemos que el próximo informe de inflación, que se publica antes de la reunión de noviembre, será ligeramente inferior a las previsiones del BoE sobre el sector servicios. Por otro lado, el Presupuesto se publica unas semanas después de la decisión del 6 de noviembre, lo que significa que el banco podría no incorporarlo plenamente en su toma de decisiones hasta que actualice sus previsiones de nuevo en febrero", señalan.
En su caso, siguen favoreciendo, por un estrecho margen, otro recorte este año, "aunque es una opinión poco convincente. Noviembre nos parece bastante igualado ahora mismo y los datos decidirán en uno u otro sentido", afirman.
Desde Hargreaves Lansdown coinciden en que la decisión de mantener los tipos de interés estables "no sorprende", ya que, "hasta el momento, no se observa suficiente progreso en la reducción de la inflación como para dar margen de maniobra".
Prevén que el organismo "seguirá de cerca los datos de empleo y crecimiento por ahora, ya que le preocupa frenar el crecimiento si los tipos de interés se mantienen demasiado altos durante demasiado tiempo, pero, por ahora, parece tener las manos atadas".
Por parte de XTB subrayan que, en general, el BoE "sigue dependiendo de los datos y para los siete miembros del (MPC) que votaron a favor de mantener los tipos sin cambios, el banco intenta lograr un delicado equilibrio entre el debilitamiento del mercado laboral y la inflación persistente. A menos que se produzca un debilitamiento sustancial de la demanda, la inflación podría mantenerse elevada y los tipos podrían mantenerse sin cambios durante un tiempo".
Además, destacan que, tras votar a favor de la reducción de tipos el mes pasado, Andrew Bailey votó a favor de mantenerlos sin cambios: "Aunque se trata de un voto por miembro, el voto del gobernador nos da una idea del sentimiento en el MPC y por ahora esto sugiere que el BoE mantiene una postura firme y que existe un alto nivel de exigencia para bajar los tipos de interés".



