La actividad manufacturera de China crece en agosto al ritmo más rápido en cinco meses
Las fábricas de China parecen estar recuperando el tono. Así al menos lo muestran los datos del índice de gerentes de compras (PMI) del sector manufacturero, que en agosto se ha situado en 50,5 puntos, superando la estimación del consenso de 49,7. Esta vuelta inesperada al crecimiento se debe a la recuperación de los nuevos pedidos y las exportaciones, y supone la tasa de expansión más rápida desde marzo.

El índice manufacturero de RatingDog (anteriormente conocido como PMI Caixin) se ha recuperado desde el 49,5 marcado el pasado mes de julio. La mejora se ha visto impulsada por una prolongada tregua comercial con EEUU, que ha propiciado, precisamente, la recuperación de los nuevos pedidos y las exportaciones.
En agosto, los costes promedio de las materias primas aumentaron a su ritmo más rápido en nueve meses, lo que llevó a algunas empresas a trasladar los mayores gastos a los consumidores. Los precios de venta promedio se estabilizaron tras ocho meses de caídas, según muestra la encuesta.
Además, las tendencias de ganancias muestran solo una ligera recuperación y, en general, siguen bajo presión, según ha explicado Yao Yu, fundador de RatingDog, en un comunicado. Y es que aunque la confianza empresarial general ha mejorado, el empleo en el sector manufacturero se mantiene en un nivel desalentador, según la encuesta, ya que los empresarios siguen cautelosos con la dotación de personal, reduciendo puestos de trabajo por quinto mes consecutivo.
"La última recuperación se asemeja a un respiro más que a una recuperación sostenida", ha apuntado Yu, advirtiendo sobre la persistente debilidad de la demanda interna, la posible sobrecarga de los pedidos externos y la lenta recuperación de las ganancias. Y ha añadido que "la durabilidad de la mejora depende de si las exportaciones se estabilizan realmente y de si la demanda interna puede acelerar el ritmo".
En cualquier caso, los datos de esta encuesta son mucho más optimistas que la lectura oficial publicada el domingo, que apuntaba que la actividad manufacturera se contrajo por quinto mes consecutivo en agosto, situándose en 49,4, frente al 49,3 de julio.
Tras conocerse este dato, que era la gran referencia macro en la región Asia-Pacífico del día, las bolsas han terminado con signo mixto. Por ejemplo, el índice Hang Seng de Hong Kong ha subido un 2,08% hasta los 25.593,56 puntos, liderado por Alibaba Group, que ha rebotado un 18% tras presentar resultados, mientras que el CSI 300 de China continental ha bajado un 0,12% en una jornada volátil marcada por la ausencia de la referencia de Wall Street (este lunes cierra por la festividad del Labor Day).
En Japón, el Nikkei 225 ha logrado recudir sus pérdidas y ha terminado este lunes con una bajada del 1,24% hasta los 42.563,60 puntos, mientras que el índice Topix se ha dejado un 0,72%. Precisamente este lunes también se ha publicado el PMI manufacturero del país nipón, que ha aumentado al 49,7 en agosto, desde el 48,9 registrado en julio, lo que muestra un deterioro más lento de las condiciones comerciales.
Las empresas registraron solo una ligera caída en la producción, mientras que la contratación de personal repuntó ligeramente. Sin embargo, el total de nuevos pedidos continuó disminuyendo, y la caída de los nuevos pedidos de exportación se aceleró desde julio, lo que provocó una mayor reducción de la actividad de compra, han mostrado los datos dados a conocer por S&P Global.
En Corea del Sur, el índice Kospi ha caído un 1,35% y ha terminado instalado en los 3.142,93 enteros, mientras que el Kosdaq de pequeña capitalización ha perdido un 1,2%. Y en Australia, el índice de referencia S&P/ASX 200 ha retrocedido un 0,51% hasta los 8.927,70 enteros.



