El titán tecnológico que pisa el acelerador: rumbo a los 4 billones con la IA al volante
En cuestión de semanas, Microsoft podría coronarse como el nuevo gigante de los 4 billones de dólares. Así lo cree Dan Ives, analista estrella de Wedbush, quien ha vuelto a elevar su apuesta por el coloso de Redmond en un mercado cada vez más obsesionado con la inteligencia artificial.
Si alguien pensaba que tras el rally bursátil de Nvidia el podio estaba ocupado, la respuesta parece clara: aún queda sitio en este selecto club.
"POTENCIAL ALCISTA DEL 19%"
La proyección de Wedbush es rotunda: Microsoft alcanzará los 4 billones de dólares de capitalización este verano. Con la acción rozando ya los 503 dólares, su máximo histórico, bastaría con un impulso adicional de menos de 40 dólares por título para alcanzar la mágica cifra.
Y, según Ives, eso no es más que el principio: su nuevo precio objetivo para la compañía se sitúa en los 600 dólares, lo que implica un recorrido alcista del 19% y abre la puerta a un futuro aún más ambicioso: los 5 billones de capitalización en los próximos 18 meses.
“El mercado aún no ha descontado el impacto real de la nube y la inteligencia artificial en Microsoft”, sostiene Ives. Para él, la aceleración de acuerdos empresariales vinculados a la IA es tan potente que no solo está reforzando la posición de Microsoft frente a competidores como Amazon o Alphabet, sino que también está reconfigurando el tablero sectorial.
“Clientes de todos los sectores, desde las finanzas hasta el retail, están desplegando casos de uso que antes solo eran promesas”, subraya este estratega.
AZURE, DESPIDOS Y CAPEX: EL CÓCTEL GANADOR
El último trimestre despejó cualquier duda: la nube de Azure no solo mantuvo su ritmo, sino que la esperada desaceleración se esfumó. Las cuentas del 30 de abril fueron un golpe sobre la mesa, alimentando una subida del 7,6% en la sesión posterior que catapultó el valor desde sus mínimos anuales del 8 de abril.
Pero no solo los ingresos explican la fortaleza del título. La mayor ronda de despidos del año anunciada hace unos días es una medida quirúrgica para contener costes sin frenar la inversión en inteligencia artificial y en cloud computing.
Y es que el músculo financiero de Microsoft es brutal: la compañía planea invertir 80.000 millones de dólares en capex en el ejercicio fiscal 2025, con la intención de mantener el crecimiento en 2026 y expandir sus centros de datos.
“Es una apuesta estratégica para adaptarse a las leyes de escalado y a la imparable demanda”, explica Ives.
MNMs: LA NUEVA DELICIA DE WALL STREET
En Wall Street ya hay un acrónimo para este triunvirato bursátil: M-N-M. No hablamos de caramelos, sino de tres gigantes: Microsoft, Nvidia y Meta Platforms. Jim Cramer, célebre inversor y presentador de la CNBC, ha creado esta fórmula para resumir el tridente imbatible del mercado. Y no es casualidad: los tres comparten la capacidad de rentabilizar la revolución de la IA a gran escala.
Además, el contexto macro favorece esta narrativa. El frenazo de los aranceles de Trump, la estabilidad tras el dato de empleo en EEUU y la expectativa de una temporada de resultados potente dibujan un panorama fértil para los inversores tecnológicos.
Como destaca Ives, “Microsoft ha demostrado que no solo es líder en software, sino también en la infraestructura que hará posible el próximo salto digital”.
CONCLUSIÓN: MICROSOFT, UNA LOCOMOTORA IMPARABLE
La historia bursátil de Microsoft es la de una locomotora que ha aprendido a acelerar en cada curva tecnológica. Hoy, con la inteligencia artificial y la nube como raíles principales, la compañía está lista para rebasar la simbólica cifra de los 4 billones.
Pero el verdadero viaje podría estar solo comenzando. Los inversores que se suban ahora al tren pueden encontrar en Redmond algo más que una acción: una máquina de crecimiento con destino a la próxima gran frontera digital.
