El RBA de Australia mantiene los tipos en el 3,6% y decidirá en función de los datos
El Banco de la Reserva Federal de Australia (RBA, por sus siglas en inglés) ha mantenido este martes los tipos de interés en el 3,60%, una decisión que se ha situado en línea con lo esperado.
En el comunicado para explicar su decisión, el RBA ha destacado que "la caída de la inflación subyacente se ha ralentizado", según muestran los últimos datos, aunque "tanto la inflación general como la subyacente se situaron entre el 2% y el 3% en el trimestre de junio".
Sobre el crecimiento económico, el organismo ha resaltado que "los datos muestran que la demanda privada se está recuperando un poco más rápido de lo previsto, reemplazando a la demanda pública como motor del crecimiento. En particular, el consumo privado se está recuperando a medida que aumentan los ingresos reales de los hogares y se relajan las condiciones financieras. El mercado inmobiliario se está fortaleciendo, lo que indica que las recientes bajadas de los tipos de interés están surtiendo efecto. El crédito está disponible tanto para hogares como para empresas".
A nivel global, el RBA ha indicado que "existe algo más de claridad sobre el alcance y la magnitud de los aranceles estadounidenses y las respuestas políticas en otros países, lo que sugiere que es probable que se eviten resultados más extremos".
"No obstante", ha reconocido la entidad, "se espera que la evolución de la política comercial tenga un efecto adverso en el crecimiento económico mundial a largo plazo".
EVOLUCIÓN DE LA POLÍTICA MONETARIA
En relación a la futura senda de los tipos de interés, el banco central ha comentado que "las condiciones financieras se han relajado desde principios de año y esto parece estar teniendo cierto impacto, pero llevará algún tiempo ver los efectos completos de las reducciones anteriores de las tasas".
En este sentido, el RBA ha considerado "apropiado mantener la cautela y actualizar su perspectiva a medida que evolucionan los datos".
LA VALORACIÓN DE LOS EXPERTOS
Los expertos de Oxford Economics afirman que la inflación se ha mostrado volátil en tasa mensual y el RBA prefiere esperar a conocer la tasa trimestral, más fiable, para tomar sus decisiones.
"A pesar de las recientes fluctuaciones en la trayectoria de la inflación, seguimos confiando en que el RBA ha hecho lo suficiente para contener el aumento de precios", explican.
"A medida que los subsidios estatales a la electricidad se vayan incorporando a los datos, prevemos que la inflación subyacente se modere al 2,5% en los próximos meses. Esto permitirá al RBA recortar los tipos en noviembre y de nuevo en el primer trimestre de 2026", concluyen.
