Moodys baja la calificación de EEUU de AAA, la máxima nota, a Aa1, por su elevada deuda
La agencia Moodys rebajó el viernes la calificación crediticia soberana de Estados Unidos en un nivel, de AAA -la máxima nota- a Aa1. La agencia ha tomado esta decisión debido a la elevada deuda del país, los crecientes desafíos para financiar el déficit presupuestario y el aumento del coste de refinanciar la deuda en un entorno de altos tipos de interés.

Con esta rebaja, Moody's se une a otras grandes agencias de calificación. S&P fue la primera en tomar esta medida en 2011, y Fitch la siguió en 2023, ambas reduciendo la calificación de EEUU a AA+.
La deuda de EEUU asciende ya a 36 billones de dólares. "Esta medida subraya el sombrío panorama fiscal de EEUU y pone de relieve la falta de voluntad política en Washington para abordar el problema", indican los estrategas de Danske Bank.
Sin embargo, los expertos optar por quitar peso a la decisión debido a que era algo esperado tras lo anunciado por las otras agencias con anterioridad.
Insisten en la idea de que el elevado endeudamiento de EEUU y de las economías desarrolladas del mundo es algo conocido y que no tiene visos de cambiar.
"Hay poco o ningún interés en resolver la situación, especialmente cuando el Partido Republicano se encamina a aprobar unos 5 billones de dólares en recortes fiscales y un aumento del techo de deuda de 4 billones. Claramente, el conservadurismo fiscal ha muerto", indica Michael Brown, analista sénior de Pepperstone.
Junto a la rebaja, Moodys ha cambiado la perspectiva de EEUU de "negativa" a "estable", indicando que no espera otro recorte en el corto plazo. Sin embargo, ha advertido que una pérdida repentina de confianza del mercado o un deterioro adicional en los indicadores de deuda podrían provocar nuevas degradaciones.
La Casa Blanca ha criticado la decisión de Moodys, y el director de comunicaciones, Steven Cheung, señaló al economista de Moodys, Mark Zandi, como un oponente político de Trump.



