La Tokenización de los Fondos de Inversión
Los escépticos argumentan que los riesgos de las criptomonedas podrían trasladarse al mundo financiero tradicional. Los bancos americanos están incorporando la tecnología que sustenta las criptomonedas a los fondos de inversión. Se anunció hace poco la asociación para lanzar tokens digitales que otorgan la propiedad de fondos gestionados por muchas de las mayores firmas de inversión, así como las propias divisiones de gestión de activos.
A partir de ahora, la tokenización no tendrá vuelta atrás. La Ley Genius (Guiding and Establishing National Innovation for U.S. Stablecoins) la medida que crea un marco regulatorio para los dólares tokenizados, conocidos como monedas estables, y promulgada por el presidente Trump la semana pasada, está desatando una ola de iniciativas para tokenizar todo, desde acciones individuales hasta fondos y activos reales.
Los fondos de inversión son un elemento básico de inversión popular tanto entre instituciones como entre inversores particulares. La tokenización puede ayudar a los gestores de estos fondos a reducir costes y el tiempo de liquidación de las transacciones. Sus defensores afirman que los tokens podrían facilitar a los inversores la pignoración de sus participaciones en fondos como garantía o la compra de acciones.
Los escépticos argumentan que podría traer la volatilidad de las criptomonedas y los riesgos de ciberseguridad al mundo financiero tradicional. JPMorgan Chase fue el primer banco global en construir una plataforma basada en blockchain que permite tokenizar y realizar transacciones con activos. Goldman Sachs lanzó una plataforma de tokenización a finales de 2022 para ayudar a sus clientes a emitir bonos. Y algunos gestores de fondos, como BlackRock y Franklin Templeton, han lanzado fondos tokenizados en blockchains públicas.
Quienes defienden la tokenización afirman que podría transformar los mercados financieros al permitir transacciones más económicas, rápidas y eficientes, a la vez que introducen nuevos usos para los activos tradicionales.
La claridad regulatoria en torno a las monedas estables, que son, en realidad, dólares tokenizados, podría impulsar una mayor actividad en el sector de la tokenización. Se espera que la Ley Genius impulse una mayor adopción de las monedas estables y allane el camino para que las empresas ofrezcan productos tokenizados sin temor a medidas regulatorias imprevistas.
Esta norma abre un camino para que los mercados financieros se conviertan en el impulsor de una nueva Edad de Oro de la economía mundial y parece que de nuevo los americanos serán los protagonistas.
