La burbuja en la IA, la rebaja de expectativas de recortes de la Fed y Michael Burry presionan a las bolsas

"Michael Burry ha terminado con esto. En una breve carta enviada ayer, anunció que liquidará sus fondos y devolverá el capital porque, según dijo, su estimación del valor de los títulos no está ahora, y no lo ha estado desde hace algún tiempo, en consonancia con los mercados", escribe Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote.

"En pocas palabras, lleva bastante tiempo pensando que el mercado está sobrevalorado. Ha estado corto en compañías en plena euforia como Nvidia y Palantir. Y tiene sus razones. Pero, al parecer, empieza a desesperarse ante el tiempo que puede tardar el mercado en volver en sí. Volver en sí significa que las valoraciones reflejen PER, PS, P—lo que sea—que tengan más sentido para él y para muchos otros. Las compañías del S&P 500, por ejemplo, cotizan hoy con un PER medio de aproximadamente 23, muy por encima de la media histórica cercana a 18".

LA BURBUJA QUE ¿PODRÍA ESTALLAR?

Son muchos los estrategas que están cada vez más preocupados por la existencia de una burbuja en la tecnología propiciada por el boom de la IA. Las alzas imparables en estas compañías han impulsado a las bolsas, especialmente al otro lado del Atlántico, pero cada vez preocupa más que esta euforia tecnológica acabe implosionando.

Cada vez preocupa más que esta euforia tecnológica acabe implosionando

Stephen Innes, gestor de SPI Asset Management, advierte que el espectacular repunte de las tecnológicas ligado a la inteligencia artificial está empezando a mostrar signos inequívocos de agotamiento. Según el analista, el mercado lleva meses impulsado por una “euforia unidireccional” en torno a la IA, una tendencia que ha empujado a los inversores minoristas a situarse “grotescamente pasados de vueltas”, asumiendo riesgos muy por encima de su capacidad real. La burbuja, afirma, no sólo se ha inflado por el entusiasmo en torno a modelos generativos y chips de alto rendimiento, sino también por un posicionamiento técnico extremadamente frágil, vulnerable a cualquier repunte de la volatilidad.

Innes subraya que el mercado está atravesando una fase clásica de unwind—deshacer posiciones largas— que suele durar unas 25 sesiones, y que se encuentra ya en su tramo final. Este proceso está intensificando las ventas en los valores tecnológicos más calientes del rally de 2024 y 2025, especialmente aquellos beneficiados por la narrativa de la IA. Cuando la volatilidad repunta, las máquinas venden, y cuando venden, la volatilidad sube aún más. Este círculo vicioso —“el carrusel”, como lo describe— agrava cualquier corrección en los títulos ligados a la inteligencia artificial, que han subido con demasiada rapidez y demasiado consenso.

La narrativa de la IA ha generado un mercado desconectado de los fundamentales

El analista explica además que muchos intermediarios del mercado están en una posición incómoda: se ven obligados a vender aún más cuando las cotizaciones bajan, lo que amplifica las caídas y añade más presión sobre los valores tecnológicos. Este mecanismo intensifica los descensos en valores tecnológicos de gran peso, como Nvidia, mientras que el S&P 500 se vuelve extremadamente sensible a cualquier repunte en la volatilidad de los bonos. El desfase entre la volatilidad del mercado de renta fija (MOVE) y el comportamiento del S&P 500 es, según Innes, uno de los indicadores que confirma que el rally tecnológico está bajo presión.

Innes también subraya que la narrativa de la IA ha generado un mercado desconectado de los fundamentales. Habla directamente de unas bolsas impulsadas más por expectativas casi mitológicas sobre la productividad futura que por beneficios presentes. Para él, el mercado está entrando en una fase en la que el miedo al crecimiento —y a que la IA no pueda sostener eternamente las valoraciones— está pesando más que cualquier otra cosa.

LA FED PODRÍA FRENARSE

A esto se suma la rebaja de expectativas de que la Fed recorte tipos en la reunión del 9 y 10 de diciembre. The Wall Street Journal explica que el camino hacia nuevos recortes de tipos se ha enturbiado por una división interna inédita en la Reserva Federal. El Comité está fracturado entre quienes ven la inflación persistente como el mayor riesgo y quienes creen que el mercado laboral se está enfriando demasiado.

The Wall Street Journal advierte de una división interna inédita en la Reserva Federal

Esa ruptura, agravada por el cierre del Gobierno estadounidense —que ha dejado a la Fed sin los datos oficiales de empleo e inflación que suelen guiar sus decisiones—, ha complicado lo que parecía un plan claro hace dos meses. Según el diario, los halcones han endurecido su oposición a seguir recortando las tasas oficiales y han cuestionado abiertamente la posibilidad de una tercera bajada en diciembre, lo que hace que esa reunión se plantee ahora como un "cara o cruz" que no ha sentado bien a los mercados.

"La evolución más probable de la economía sugiere que será apropiado mantener los tipos de interés en su nivel actual durante algún tiempo, para equilibrar los riesgos de inflación y empleo en un entorno tan incierto", afirmó recientemente Susan Collins, presidenta de la Reserva Federal de Boston.

Como resultado, los mercados han recalibrado sus expectativas. Si hasta hace apenas unos días los operadores asignaban al menos una probabilidad de 2 a 1 a un recorte de un cuarto de punto, ahora esa probabilidad se ha reducido a un lanzamiento de moneda, según las lecturas de los mercados de futuros recopiladas por la herramienta FedWatch de CME Group.