De Guindos (BCE): "Los tipos están en buena posición para afrontar la incertidumbre"

"El nivel de incertidumbre es elevadísimo. El nivel de tipos actual está en buena posición para hacer frente a estas incertidumbres", ha destacado De Guindos en los Cursos de Verano de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander.

Cabe recordar que en la última reunión de política monetaria, la presidenta de BCE, Christine Lagarde, aseguró que "el BCE se acerca al final del ciclo de recortes de su política monetaria".

De cara al futuro, De Guindos ha evitado dar pistas claras de cuál será el próximo movimiento en los tipos de interés, aunque sí ha reiterado que cada decisión se basará exclusivamente en la evolución de los principales indicadores macroeconómicos.

"Hemos dicho muy claramente que queremos mantener toda la opcionalidad posible debido a la situación de incertidumbre, y vamos a ser dependientes de los datos e ir reunión a reunión", ha agregado.

Sobre los datos, se ha mostrado optimista, ya que ha asegurado que espera cumplir "en los próximos meses" el objetivo de estabilidad de precios del organismo. Sin embargo, ha alertado sobre un posible repunte de la inflación si se revierte alguno de los dos factores que han contribuido a su caída: la apreciación del euro frente al dólar y el descenso de los precios de la energía.

"La inflación está por debajo del objetivo, no solo la general, sino que la subyacente se va acercando al 2%. También la inflación de servicios, que era la que más nos preocupaba, mantiene la trayectoria descendente", ha agregado.

También se ha mostrado preocupado por los efectos que pueden tener en los precios los aranceles, por lo que ha llamado a "esperar" a que terminen las negociaciones entre EEUU y sus principales socios comerciales. El escenario base del BCE es que EEUU establezca un arancel del 10% que no encontrará respuesta por parte de la UE.

Sin embargo, los analistas del banco también manejan escenarios más pesimistas sobre la evolución de los aranceles, y creen que en el peor de los casos se puede producir una fragmentación global.

"Si se da una fragmentación de la economía mundial puede llevar a una ruptura de las cadenas de valor en el mundo que tenga un impacto negativo desde el punto de vista del coste de las empresas, y por lo tanto afectar negativamente a la inflación", ha explicado De Guindos.

Además de sobre los precios, los aranceles amenazan con tener un efecto sobre el crecimiento económico mundial, un escenario que también preocupa al BCE.

"Tememos que la desaceleración de la economía, que es una realidad en el mundo, empiece a afectar a la solvencia de las empresas, sobre todos las empresas que se vieron afectadas por el Covid y aumentaron su endeudamiento", ha concluido.