AT&T gana más de lo esperado, pero las previsiones no convencen al mercado

La compañía texana ha anunciado que su beneficio por acción ascendió a 0,54 dólares por título entre abril y junio, tres centavos más que lo registrado hace un año y uno más que la previsión del consenso. Ello se tradujo en un beneficio neto de 4.500 millones de dólares, 1.000 millones más que los 3.500 millones conseguidos en el mismo período comparable anterior.

Los ingresos del segundo trimestre totalizaron 30.800 millones de dólares, frente a 29.800 millones en el mismo trimestre del año anterior, lo que representa un aumento del 3,5%. Este crecimiento se debió a mayores ingresos en los segmentos de Movilidad y Wireline (servicios con cables físicos) para consumidores, parcialmente compensados por caídas en Wireline para empresas y en México, que incluyeron impactos negativos por el tipo de cambio. Los ingresos operativos ascendieron a 6.500 millones de dólares frente a los 5.800 millones registrados el año previo.

AT&T sumó 401.000 nuevos clientes de telefonía móvil en el período. Esta cifra superó las estimaciones de los analistas, que proyectaban un aumento de 301.000. A principios de esta semana, Verizon informó una pérdida de suscriptores. La más pequeña de las tres grandes operadoras de telecomunicaciones de EEUU, AT&T ha ganado terreno con una nueva "garantía al cliente" lanzada en enero, que promete mayor seguridad en la red y mejor servicio al cliente, además de ofrecer mejores ofertas en teléfonos inteligentes en un momento en que los consumidores son especialmente sensibles a la inflación.

La compañía también ha estado fortaleciendo su servicio de internet para el hogar. Su oferta de Internet Air, un servicio fijo inalámbrico que utiliza su red móvil 5G para proporcionar internet en el hogar, sumó 203.000 nuevos clientes, superando las expectativas del mercado, que eran de 169.000. Además, agregó 243.000 suscriptores de fibra óptica.

Por otro lado, la compañía ha explicado que espera obtener ahorros fiscales de entre 6.500 y 8.000 millones de dólares entre 2025 y 2027 debido a disposiciones fiscales incluidas en la One Big Beautiful Bill Act, la ley fiscal de Trump. Estas cifras incluyen ahorros estimados de 1.500 a 2.000 millones en 2025 y de 2.500 a 3.000 millones en 2026 y 2027, respectivamente.

La compañía planea invertir 3.500 millones de estos ahorros en su red, para acelerar la expansión de su internet de fibra hasta llegar a 4 millones de ubicaciones por año, ritmo que espera alcanzar a fines de 2026. Gracias a este despliegue más rápido de fibra, AT&T estima que para 2030 habrá alcanzado aproximadamente 50 millones de ubicaciones de clientes con su red de fibra en regiones donde opera y más de 60 millones de ubicaciones, incluyendo los activos de fibra adquiridos de Lumen y la joint venture Gigapower.

AT&T también actualizó su guidance para todo el año, publicada en abril, aumentando las previsiones de ingresos y ganancias por servicios móviles, junto con el gasto de capital, aunque ajustó ligeramente a la baja su expectativa de crecimiento de ingresos por fibra. La empresa mantiene su previsión de ganancias ajustadas entre 1,97 y 2,07 dólares por acción, cifras que han decepcionado a un mercado que esperaba hasta unas ganancias de 2,09 dólares por título.

La compañía también ha anunciado un plan de recompra de acciones por 4.000 millones de dólares este año, del que se han completado 1.300 millones hasta la fecha.

"Estamos ganando en un mercado altamente competitivo, con las redes inalámbrica y de fibra más grandes del país. Los clientes eligen cada vez más a AT&T porque contamos con la mejor tecnología y las mejores opciones para conectividad inalámbrica y de banda ancha, respaldadas por la Garantía AT&T", ha señalado John Stankey, presidente y director ejecutivo de AT&T.