¿Qué hace falta para que Santander siga ganando posiciones?
El mes de agosto para Santander ha sido redondo.

El banco no se ha ido de vacaciones, ni mucho menos, y desde los mínimos dibujados el pasado 1 de agosto hemos podido apreciar cómo se ha revalorizado un 16%. Estas fuertes subidas le han permitido dibujar máximos de todos los tiempos en los 8,3380 euros. Lejos de dar señal alguna de debilidad, estamos viendo cómo está dando forma a una figura de continuación alcista. Lo más normal es que podamos ver una señal de fortaleza en cualquier momento. Para ello debería empezar por anular el hueco bajista que se dejara el pasado 26 del pasado mes de agosto en los 8,2840 euros.
La señal que confirmaría el comienzo de un nuevo impulso sería un cierre por encima de los 8,3380 euros. Esto dejaría al banco en subida libre, con el camino despejado para que podamos ver una extensión de las alzas hasta el nivel de los 9 euros. No veremos una señal de debilidad mientras que se mantenga cotizando por encima de los 7,50 euros, precios bastante alejados de los actuales.




