DIA avisa al mercado del riesgo para su negocio de los disturbios en Cataluña
Los disturbios en las calles de Barcelona no salen gratis. Este lunes, el presidente del Instituto de la Empresa Familiar, Francisco Riberas, alertaba del daño a la imagen que se proyecta a clientes e inversores internacionales. Precisamente, esa misma advertencia la ha realizado el grupo de supermercados DIA, que asume que los enfrentamientos pueden dañar su negocio.
“El grupo puede verse afectado negativamente por los eventos políticos en Cataluña”, resume en el folleto de ampliación de capital remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). “Hay incertidumbre respecto al resultado de las tensiones políticas y sociales en Cataluña que pueden resultar en volatilidad de los mercados de capitales y de las condiciones de financiación en España”, argumenta.
Y ahonda en esta misma línea: “Puede afectar al entorno en el que el grupo opera en Cataluña y en el resto de España, que podría tener un efecto material adverso en el negocio del grupo, los resultados operativos, condiciones financieras y previsiones”, resume.
El grupo recuerda que España es su principal mercado, porque aquí generó el 60,3% de sus ingresos al cierre del primer semestre de 2019. “Como consecuencia, cualquier impacto adverso, económico, político, social o de otra naturaleza en España, puede afectar a una significativamente parte del negocio. Además, asume que, por esta dependencia de España, “es vulnerable a una caída de la economía”.
EL COSTE DEL ERE
DIA detalla los posibles riesgos para su actividad en el folleto de ampliación de capital, de 605 millones de euros, con la que espera recuperar la fortaleza de sus estados financieros, una vez el 70% de su accionariado está en manos del magnate ruso Mijaíl Fridman. Uno de los flecos pendientes es la definición final de su modelo de negocio y de su red de tiendas.
Hasta septiembre, la compañía ha reducido su plantilla en 1.419 personas y le quedaban otras cuatro pendientes, según desglosa al supervisor. La empresa recuerda que anunció un proceso de despidos colectivos el pasado mes de febrero. Entonces planteaba reducir su plantilla en más de 2.000 personas tras asumir números rojos de 252 millones de euros durante el pasado ejercicio 2018. Un ERE que rebajó tras las negociaciones con los representantes de los trabajadores.
En conjunto, DIA apunta que los recortes de personal ya le han supuesto casi 40,3 millones de euros. Una cifra que recoge “el total de los costes totales estimados relacionados con el despido colectivo aprobado y otras indemnizaciones en España y en otros países”.
RECORTES EN SEPTIEMBRE
Pero esas más de 1.400 bajas no son las únicas. DIA indica que el 13 de septiembre de este año “la compañía ha lanzado un proceso de despido colectivo de su filial Grupo El Árbol, fundamentalmente está relacionado con el cierre previsto de Max Descuento y de dos tiendas La Plaza de DIA situadas en Madrid, que puede afectar a un máximo de 210 empleados y que está completamente provisionado a 30 de septiembre”. Finalmente, tras las negociaciones con los sindicatos, se ha quedado en 186 despidos de ambas enseñas.
En este mismo sentido, en septiembre, había cerrado 313 tiendas en Brasil, 44 locales propios y 269 franquicias. Con el consiguiente despido de 259 empleados. En ese mismo documento, recuerda que a 31 de junio, las últimas cuentas que ha remitido a la CNMV, ya había cerrado 323 tiendas en España.
La compañía de distribución también tenía en su hoja de ruta la venta de la cadena de perfumerías Clarel. Sin embargo, hace un mes frenó en seco esta desinversión, que planeó durante meses, asegurando que se trataba de una unidad de negocio con firme potencial. En total, Clarel sumaba cerca de 1.200 tiendas en España.
En cuanto a la ampliación de capital en sí, por valor de 605 millones de euros, Fridman suscribirá a través de su sociedad LetterOne, de entrada, 418 millones de euros, aunque deja la puerta abierta a alcanzar los 500 millones. En el documento remitido a la CNMV, DIA asegura que “a fecha de registro del presente folleto, el grupo continúa desarrollando su plan de negocio a largo plazo basado en su estrategia de transformación”. “No es posible garantizar que la estrategia y los objetivos del grupo en el marco del nuevo plan de negocios se cumplan plenamente, que se alcancen en el plazo previsto o que no se superen los costes de ejecución esperados”, indica al supervisor.
