Cuidado con Santander: ¿cabeza y hombros de continuidad?
Suele decirse que tanto va el cántaro a la fuente que termina por romperse. Pues este lunes el precio, aunque por poco, cerraba perforando un importante soporte de corto plazo.
Antes que nada, comentar que las formaciones en cabeza y hombros cuando son más fiables es cuando se dan después de un importante movimiento alcista, digamos como si de un techo de mercado se tratara. Es ahí donde estos son más fiables. Sin embargo, nos encontramos con esta formación después tras una caída y dentro de una impecable fase correctiva desde enero de 2018. Y esto es lo único, si acaso, que nos puede hacer dudar acerca de la fiabilidad de la pauta correctiva. Pero sí, lo que tenemos delante es un potencial cabeza y hombros, donde el precio estaría comenzando a perforar la línea clavicular de la formación. Y como siempre decimos, el precio manda siempre. Y si esta finalmente se confirmara, cerrando por debajo de los 3,47 euros, cabe esperar un movimiento en busca de los mínimos anuales (3,30 euros) con una alta probabilidad, incluso, de perforarlos. La siguiente gran zona de soporte la encontramos en los aproximadamente 3,20 euros, por donde pasaría la recta soporte que une los mínimos crecientes de 2009 y de 2016.
En el gráfico semanal de largo plazo que tenemos a continuación, podemos entender el motivo por el que hacemos referencia a la zona de los 3,20 euros como soporte.
